Conversión de linterna en flexo para ebook
Amig@s: Hoy vamos a ver una interesante forma
de obtener un flexo para nuestro libro de un modo muy sencillo y económico…
En efecto, no sé si os habré comentado que me
encanta la lectura. Desde pequeño me devoraba los libros… Pero con el tiempo
fui dejando este sano hábito.
En parte por obligaciones y trabajo, en parte por
el coste de adquirirlos y también, por qué no decirlo, por el volumen de libros
que ya tenía acumulados.
Por otra parte, mi vista ya no es lo que era
y los libros con letra pequeña me fastidian enormemente, porque la vista se me
cansa rápidamente y eso hace que tenga que estar parando continuamente…
Cuando me regalaron el ebook, todo cambió:
podía poner la letra del tamaño deseado para una lectura cómoda y prolongada.
El efecto es muy similar al papel, con lo que no deslumbra, ni daña la vista y
el efecto es agradable. Finalmente, en el aparato puedo almacenar miles de
libros, con lo que lectura no me falta.
Y, por supuesto, puedo tener una copia
en el ordenador de los libros por si el ebook sufriera una avería.
Pero mi ebook no tiene luz integrada. Es, por
otra parte, lógico, pues trata de imitar a un libro de papel y éstos no tiene
luz propia. En realidad, para leer de día en la calle o un sitio bien
iluminado, la luz adicional es innecesaria. Pero la cosa cambia cuando estamos
dentro de casa, en la penumbra. O leemos de noche, por ejemplo.
Un buen flexo ayuda a que la luz sea perfecta
para leer. Ya os mostré el flexo que suelo usar cuando lo reparé en un post
anterior.
Sin embargo, quería algo aún más liviano que
incluso pudiese llevar junto a mi ebook cuando saliese.
Hay en el mercado fundas con luz integrada, y
luces que se pueden acoplar al libro… Pero tienen desventajas.
Las primeras
consumen energía de la batería del ebook, lo cual hace que, lógicamente, haya
que ponerlo a cargar con más frecuencia y esto repercutirá en la vida útil de
la batería y el ebook.
El segundo, usa pilas tipo botón. En unas
horas de uso, veremos cómo la luz se empieza a debilitar rápidamente, haciendo
la lectura difícil y debiendo forzar la vista. Aunque se trate de luces tipo
led, que dan mucha luz y consumen poco, en un tiempo de uso continuo tendremos
que cambiar las pilas.
Por otra parte, ambas soluciones son poco económicas.
Yo voy a tratar de adaptar una linterna de
leds barata para poder usarla conectada a la red. Se trata de una linterna en desuso,
pues la usaban mis hijos y terminaron por desguazarla y perder algunas partes,
como el botón trasero y el porta pilas. Pero estas linternas son tan económicas
que hasta podemos permitirnos usar una nueva.
Hay incluso algunas muy pequeñas
y ya dotadas de pinzas, a las que sólo habría que retirar las pilas, practicar
un pequeño orificio para el cable… y ya tendríamos un flexo portátil y ligero
para poder leer y sin temor de que la luz empiece a debilitarse.
Obviamente, la electricidad de casa no nos
vale tal cual. Necesitamos un aparato que transforme la corriente alterna de
220 ó 230 voltios en corriente continua de 4.5 Voltios.
Podemos comprar un
aparatejo en una tienda de electrónica…
Pero si nos fijamos, muchos cargadores
de móviles dan justamente esta corriente de salida.
Yo mismo, tenía varios
cargadores de este tipo, algunos de los cuales ya uso para conectarlos a ventiladores
de ordenador.
Pero, ojo, es importante saber que para los
ventiladores de ordenador no importa en principio si nos equivocamos con la
polaridad y conectamos por error el cable positivo del cargador en el negativo
del ventilador. Sencillamente, no funcionará.
Pero en el caso de las luces led, podemos
fundirlas fácilmente si esto llega a ocurrir.
Por eso, lo primero es averiguar cuál es el
polo positivo y el negativo de la linterna y del alimentador.
Como mi polímetro pasó a mejor vida hace
tiempo, usaré un ventilador de ordenador pequeño para ver si funciona el
cargador y la polaridad adecuada.
Además, si anotamos la polaridad de cada
cable, podremos usarlo en futuras ocasiones, que como digo, esto es un prototipo.
Con el tiempo quiero hacer algo más específico para mi libro.
Así que podemos enchufar el cargador e
introducimos un cable del ventilador con la punta pelada en un contacto de la
clavija (en mi caso es por dentro de la varilla) y el otro por la parte
externa.
Comprobamos que el ventilador funciona y ya podemos cortar la clavija,
dejando un par de centímetros de cable unidos a ésta por si en otra ocasión
quisiéramos volver a dejarlo como al principio.
Con mi multiherramienta, realizo este corte
rápidamente.
Para retirar la funda exterior del extremo, la doblo y rozo
ligeramente el codo con la cuchilla. Doblamos en otra dirección por el mismo
sitio y repetimos… Así en un momento tenemos la funda cortada y podemos
sacarla.
Para pelar los cables finos del interior, calentamos sus respectivas fundas
con un mechero y
retiramos con una uña la zona quemada de la funda (Cuidado,
que si lo hacemos antes de tiempo, nos impregnaremos los dedos de plástico
derretido muy caliente y nos podremos hacer una dolorosa quemadura!).
Volvemos a probar el alimentador con el
ventilador y anotamos el color del cable negativo y el positivo. Para
averiguarlo, podemos probar el ventilador con una pila de las de 4.5V. Vemos la
posición en que arranca el ventilador y anotamos la polaridad (en la pila pone la polaridad de cada terminal). Esto puede
servirnos para futuras detecciones de polaridad en otros cargadores o
dispositivos.
Examinamos la linterna para ver la zona donde
las pilas dan el voltaje negativo y el positivo.
Normalmente, tienen un muelle
central que es un polo y la propia carcasa metálica es el otro (basta fijarse
dónde hacen contacto las pilas). En mi caso es así (a falta del interruptor trasero,
como veremos más adelante).
Probamos si funciona la luz conectando el
cargador y tocando con las puntas de sus cables el muelle central y la carcasa.
Vemos que se enciende perfectamente.
Ya solo queda ver la forma de conectar el
cargador a las bombillas led de la linterna.
Yo he usado dos cables monofilamento muy
finos. Los he pelado por los extremos usando la llama de un mechero. Podría
haber pelado simplemente más funda del cable del cargador para no tener que
empalmar estos cables… Pero quiero preservar la mayor longitud posible de
cable.
Uno lo he doblado por un extremo pelado en
forma de V y lo he pasado por las espiras del muelle.
Con los finos alicates de
mi Leatherman ChargeTTi he sujetado el cable y girando la linterna, he
atornillado el cable al muelle.
Finalmente, he puesto cinta aislante para fijar
bien el cable y el muelle y que no varíen su posición provocando un mal
contacto.
Por otra parte, el otro cable simplemente lo
he dejado pillado entre las dos piezas de la linterna que van enroscadas. Es un
cable muy fino y apenas impide que se puedan atornillar.
Algún tiempo después,
apareció justamente la parte trasera de la linterna, la del interruptor… pero
de momento, os explico cómo he realizado el proceso inicialmente y después cómo
conecté la pieza.
Sacamos hacia afuera los dos finos cables y
los conectamos al cargador. Comprobamos que la linterna se sigue encendiendo y
pasamos a encintar los cables.
Introducimos las zonas encintadas al interior
de la linterna (por la base, que queda abierta de momento) y seguimos el proceso.
Esta solución es un tanto provisional, pues
debería haber buscado algo más sólido, como la soldadura, para lograr un
resultado más robusto y fiable. Pero como aún me queda por fabricar el soporte
y lo mismo uso otra linterna más pequeña con soporte incorporado, no me he molestado
en hacer algo muy fuerte.
No obstante, he reforzado el cable poniéndole
una abrazadera que lo sujeta contra la carcasa de la linterna y, al mismo
tiempo, puede servirnos como punto para conectarlo a un soporte.
Además, he tapado el feo orificio trasero de
la linterna con un corcho de botella de vino (algo realmente basto e
improvisado).
Con el tiempo, recortaré el corcho o le pondré la propia base de
la linterna –donde se aloja el botón de encendido- cuando aparezca. De modo que
también podamos apagar la linterna o flexo desde este interruptor. De momento,
el interruptor/tapa está en paradero desconocido y, como ya he dicho, se trata
de una prueba.
La luz que aporta es muy clara y permite leer
cómodamente. Si bien, el haz está muy concentrado, con lo que hay que separar
al menos 40 ó 45cm la luz del libro para que ésta sea homogénea y esto complica
un poco la fabricación del soporte, que quería que fuese portátil.
Pero, como digo, podéis buscar una linterna
que tenga un mayor ángulo de iluminación o bien poner una o dos linternas
pequeñas, de modo que se puedan fijar en la ropa o en el mismo libro.
En un futuro post, Os mostraré la solución
más eficaz que encuentre. De momento, ya sabéis como hacer funcionar una
linterna de leds con corriente eléctrica de 220 voltios.
Y como os dije antes… Apareció la pieza
trasera de la linterna. Ya tenemos lo más difícil hecho, que es prácticamente
buscar la polaridad del cargador y hacer las conexiones.
El problema es que al colocar la pieza
trasera, ya no queda sitio para el cable de alimentación, que lo sacaba
justamente por el hueco trasero… así que con una broca del mismo diámetro del
cable (4.5mm) hago el orificio rápidamente en el lateral de la linterna.
Paso el cable y ya puestos, realizo las
soldaduras entre los cables adicionales y el cable del cargador. Así quedará
más firme.
Pero, antes de soldar, paso unos trocitos de funda termorectráctil
que he cortado con las tijeras de la multiherramienta…
Y, antes que se me
olvide, hago un nudo al cable del cargador por la parte interna, para que no se
salga hacia afuera.
Tras soldar, caliento las fundas termoretráctiles, que se
apretarán contra los cables dándoles un aislamiento perfecto y mayor
resistencia.
Vuelvo a conectar el polo correspondiente al
lado de la bombilla y el otro cable lo conecto al muelle del lado opuesto, el
del tapón-interruptor, usando el mismo sistema inicial, que ha demostrado ser
fiable.
De momento, no le coloco la abrazadera hasta
que solucione el sistema de fijación… Lo cierto es que ahora queda más estética
y puedo encenderla y apagarla manualmente sin tener que estar retirando el
cargador del enchufe continuamente.
El resultado podéis verlo en la foto inicial del post... una Linterna que podemos usar indefinidamente sin temor que la pila se debilite o agote, porque va enchufada a la red.
Ya sólo queda empezar a experimentar con
cargadores más pequeños y linternas menores para conseguir un modelo
auténticamente transportable.
Y, por supuesto, si no queremos depender del
cargador, para no tener que estar buscando tomas de corriente donde conectarlo,
también podemos aplicar el sistema a una o varias linternas de bombillas leds
que funcionen con pilas de botón… En el caso que hemos visto, podemos usar el
soporte de las bombillas que tenía esta linterna que usaba tres pilas corrientes,
que es bastante compacto, de modo que podamos conectarlo a una linterna que use
pilas tipo botón. Notaremos un enorme aumento en la duración de la luz y,
además, será mucho más económico cuando tengamos que sustituirlas. Es más,
podemos usar la linterna de modo híbrido: que use sus pilas botón, pero que
cuando estas estén agotadas, podamos conectar el cargador o el bloque de pilas
a unas terminales libres que habremos dejado. Las posibilidades son tan
variadas como vuestras necesidades...
¡Y a disfrutar de la lectura!
.
Yo no me llevo nada bien con los cables, son como mi asignatura pendiente de vida.
ResponderEliminarLo comparto para quien lo quiera hacer pues,de nuevo, me ha parecido muy interesante.
Besín. Mk