Como limpiar ordenador: memoria y alimentación. Mantener ordenador. Limpieza interna de Pc

MANTENIMIENTO DE ORDENADOR: Alimentación y memoria

En el post anterior ya vimos como abrir nuestro PC para acceder al interior, cómo limpiar los ventiladores y también dimos una limpieza general de polvo…

Ahora vamos con dos piezas vitales en el ordenador: las placas de memoria y la fuente de alimentación.

Recordaros que debéis tener desenchufado el ordenador –a ser posible desde el día anterior- y que no debéis usar líquidos… así que las manos bien secas.

Empezaremos por las placas de memoria. Son muy fáciles de reconocer porque son alargadas y estrechas y están fijadas a la placa base sobresaliendo de ellas. Están orientadas perpendicularmente a la placa y van fijadas por los extremos.

Para retirarlas, separaremos las pestañas de los extremos y tiraremos suavemente de la placa. Saldrá muy fácilmente.

Retiraremos el polvo que tengan encima con la brocha suave y limpiaremos los contactos con un algodón humedecido en alcohol.

Si tiene más placas de memoria, iremos repitiendo esto con todas.

Importante: fijaros bien en qué posición están para evitar después forzar las pestañas o partir la placa al tratar de colocarla de una manera inadecuada.

Para ponerla es exactamente igual pero a la inversa: metemos la placa todo lo que podamos y apretamos suavemente las pestañas hasta que se cierren y deje fijada la placa de memoria.

Un mal contacto de las placas de memoria puede ocasionar que el ordenador haga cosas raras como que se apague sin motivo, se reinicie solo…

Ahora vamos a proceder con la fuente de alimentación. Parte esencial porque es lo que da la energía a todas las piezas de la CPU.

Es bastante delicado, pero si lo hacemos con calma y cuidado, no tendremos problema alguno.

Debemos retirar los cuatro tornillos situados en la parte trasera de la torre que sujetan la caja de la fuente de alimentación. Ojo, que sean los tornillos de dicha caja, no del ventilador u otros tornillos…

Enseguida notaremos que la caja cede y queda suelta.

Con cuidado, vamos sacándola y si es preciso, deberemos desenganchar el haz de cables que sale de ella, que a veces pasa por un gancho que los mantiene en su posición. En ningún caso es preciso retirar las bridas que unen los cables entre si.

Examinamos la caja y vemos que tiene cuatro tornillos que fijan el ventilador y otros cuatro que mantienen la caja cerrada.

Retiramos éstos y con mucho cuidado, a veces apalancando suavemente con un destornillador plano, logramos abrirla.

Nos quedará la tapa, con dos laterales, por un lado. Y por otro la base que tiene los circuitos, el ventilador y cables.

Damos con el pincel un repaso general a todo (foto inicial) y si el ventilador tiene mucho polvo acumulado, que es lo más frecuente, podemos retirarlo aflojando los cuatro tornillos traseros. Así tendremos mejor acceso.

Procedemos con este ventilador exactamente igual que con los otros que tiene el ordenador y que vimos en el post anterior.

Tras un repaso final a todo el interior de la caja, volvemos a atornillar el ventilador, cerramos la caja fijándonos muy bien en las pestañas para no doblar ninguna –aunque suele ser chapa fuerte y no se dobla fácilmente-. Y volvemos a colocar la caja en su sitio procurando que el haz de cables quede en la misma posición que tenía antes.

Por supuesto, cuando esté la caja desmontada de la torre, podemos dar un repaso al polvo que pueda haber por detrás. Así la placa base quedará bien limpia por todos lados y también el interior de la torre.

Y ya tenemos otras dos partes limpias Sencillo ¿no? En el próximo post, seguiremos.

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